A pesar de ser una terapia muy conocida, todavía muy pocas personas se han sometido a una sesión de Acupuntura. Por ejemplo, aunque la Acupuntura es una “medicina en sí misma”, se puede multiplicar sus efectos cuando se usa como terapia complementaria. En Clínica, en nuestra intención de realizar una “medicina integrativa”, ésta es una práctica habitual y es común finalizar una sesión de Osteopatía con Acupuntura, ya que ambas terapias realizadas de forma cruzada potencian exponencialmente sus beneficios.

La Acupuntura proviene de la Medicina tradicional china. Existen evidencias escritas desde hace miles de años sobre tratamientos acupunturales, definiéndola como una “medicina completa en sí misma”, es decir, es posible tratar cualquier dolencia del ser humano a través de la Acupuntura. La medicina china tradicional considera el cuerpo humano como un sistema de flujos de energía. Cuando estos flujos son equilibrados, el cuerpo está saludable.

La definición y la caracterización de estos puntos, está estandardizada actualmente por la Organización Mundial de la Salud. La OMS divulga resultados de ensayos clínicos desde hace varios años. Desde 1979 se reconoce la acupuntura como eficaz para el tratamiento de al menos 49 enfermedades y desordenes, lista que se ha ampliado gracias a la investigación de los últimos años.

• A nivel del aparato digestivo se puede tratar el estreñimiento, diarrea, colon irritable, vómitos, digestiones lentas.
• En reumatología: Osteoporosis, artrosis, poliartralgias.
• En neurología: Cefaleas, migrañas. Neuralgias.
• En psiquiatría: Ansiedad, depresión, tabaquismo, insomnio.
• En traumatología: Algias globales en columna vertebral como lumbalgia, cervicalgia, tendinitis, lesiones ligamentosas, hernias discales, procesos inflamatorios.
• En aparato respiratorio: rinitis, asma alergia, infecciones gripales
• En aparato sanguíneo: tensión alta y baja, tratamiento del dolor tras operación, analgesico.
• Otras: psoriasis, alergias cutáneas, estados de agotamiento.